bookmark_borderLuis Suárez no es el primero ni será el último: cuando el idioma es el mayor rival del deportista

El fichaje de Luis Suárez por la Juventus se ha visto truncado por temas burocráticos ajenos a lo estrictamente futbolístico. El charrúa, que estaba muy cerca de Italia, incluso decidió examinarse para conseguir el pasaporte del país transalpino: un examen de italiano que ha atraído toda la polémica por supuestas irregularidades a través de las cuales se facilitaba el aprobado. Según las grabaciones a las que ha tenido acceso La Gazzetta, Suárez apenas hablaba «en infinitivo» y no era capaz de conjugar los verbos correctamente, por lo que su nivel de italiano habría sido terrible.

Desafortunadamente, el delantero del FC Barcelona no es el único futbolista que ha tenido problemas aprendiendo idiomas extranjeros al cambiarse, o intentarlo en este caso, de club y de país.

Al extremo de Puerto de la Cruz hay que agradecerle su espontaneidad. Joaquín siempre tiene una sonrisa y a lo largo de los años nos ha dejado imágenes desternillantes que se recordarán para siempre entre los aficionados al fútbol. Sus entrevistas, la famosa foto con el trofeo de la Copa del Rey, lo de ‘er teni’… y su italiano.

El andaluz lo intentó con el idioma tras un encuentro frente a la Juventus de Turín a los pocos meses de instalarse en Italia, pero el resultado no fue demasiado positivo. Eso sí, siempre será recordado como una de las entrevistas más divertidas que se recuerdan en los últimos años.

Guillermo Amor, eufórico tras una victoria: «Yes, pasa que… the game was difficult»

En tierras australianas, Guillermo Amor probó suerte con el inglés tras una victoria del equipo al que por aquel entonces dirigía, el Adelaide United. La pronunciación del exjugador del Barça, unida a sus continuos lapsus en castellano hicieron de la conversación una historia surrealista.

La trayectoria de Carlos Tévez está claramente marcada por la Premier League. West Ham, Manchester United y Manchester City fueron los equipos en los que el ‘Apache’ mostró buena parte de su mejor fútbol. Aún así, parece que toda la atención del argentino estaba en el campo, y apenas dedicó tiempo para aprender inglés. Esta entrevista a pie de campo cuando ya llevaba cuatro años en el país lo deja claro.

Era todo fiesta: el PSG acababa de levantar la Ligue 1 de la temporada 2013/2014 y el Parque de los Príncipes estaba hasta la bandera para celebrar un nuevo campeonato nacional. Ezequiel Lavezzi se vino arriba y quiso intentarlo: celebrar en el idioma nacional era su objetivo… pero fracasó estrepitosamente. «¡La c***** de su madre!»

Si hay algo innegable para Unai Emery es empaparse de la cultura popular del equipo al que va. Lo hizo en el Spartak de Moscú, en el PSG y también en el Arsenal, los tres clubes extranjeros donde ha entrenado hasta ahora. En los dos últimos, de hecho, el guipuzcoano terminó haciéndose viral por sus esforzadas ruedas de prensa en las que usaba el francés o inglés para expresarse. La entonación es mejorable, pero el empeño de Emery no tiene discusión.

Gareth Bale, siete años en España y «ni idea» de castellano

El galés ya está de vuelva en sus amadas islas británicas, pero su etapa en el Real Madrid fue larga e intensa. A pesar de que el extremo jugó durante siete temporadas en el gigante blanco, su comprensión del idioma era, siendo generosos, escaso. Este vídeo subido por el propio club lo demuestra: su respuesta a Luka Modric no tiene precio.

Diciendo adiós al FC Barcelona, Alexis Sánchez viajó a Londres para desplegar su juego en la Premier League. La decisión fue totalmente exitosa y el chileno se convirtió en un auténtico ídolo de masas para la afición gunner. Goles, asistencias y partidazos que enamoraron a Emirates Stadium. A Alexis le costó, pero terminó aprendiendo inglés. Sus primeras palabras eran cautas, dubitativas… pero no se expresaba del todo mal.

Futbolistas con complicaciones para hablar idiomas extranjeros hay decenas, pero no son los únicos. En España, de hecho, tenemos un buen ejemplo en Alejandro Valverde, que antes de correr la Milán-San Remo se animó con la lengua local. Ni corto ni perezoso, el legendario ciclista mezcló castellano e italiano… y a pedalear.